Si acabas de adquirir una nueva vivienda, te acabas de mudar de piso de alquiler o, sencillamente, necesitas redecorar tu vida, este artículo te va a ayudar a saber qué primeros pasos debes dar (quizá los más difíciles). Descubre algunos consejos básicos a la hora de amueblar y decorar y ahórrate quebraderos de cabeza.

1.- Mueble principal

Lo primero que debemos hacer es pensar cuál va a ser el mueble más importante de la estancia a decorar. Hay que decidir a qué le queremos dar protagonismo y determinar aquella pieza en función de la girará el resto de la decoración. Por ejemplo, en un salón, normalmente este elemento central será el sofá.

En este punto podemos optar por darle al sofá –o a ese mueble principal que hayas elegido– el acento necesario para que marque el estilo decorativo de la estancia o, simplemente, podemos decidir qué queremos que pase desapercibido para centrarnos más en los detalles.

Lo primero que hay que elegir es su color. Si el sofá tiene un color neutro no condicionará tanto en el resto de elementos. En cambio, un color potente le dará mayor protagonismo, pero también definirá el estilo y la combinación de colores y materiales que elegiremos después.

2.- Muebles auxiliares

Una vez elegida la pieza principal hay que empezar a pensar en los muebles auxiliares. La palabra clave es armonía. Por ejemplo, en un salón, si elegimos un mueble de televisión de líneas rectas y sencillo, pasará más desapercibido pero seguirá cumpliendo perfectamente su función.

Aunque el mueble sea discreto y sencillo, no podemos olvidar que el material y color del mismo deben ir en consonancia con otros elementos decorativos y muebles auxiliares.

3.- Colores

Cuando ya hemos decidido los muebles, lo siguiente es pensar cómo crear la combinación de colores deseada. Esta composición va a marcar de forma muy importante el estilo decorativo definitivo del espacio. Tómate el tiempo necesario para decidir.

Hay muebles que pueden ayudarnos mucho a dar color, ya sea de acento o bien en composiciones armónicas con el resto de la estancia. En un comedor, las sillas son un gran aliado en este sentido.

4.- Textiles

La elección de los textiles requiere atención. Los cojines, las tapicerías y las cortinas dan mucho juego ya que por un lado pueden potenciar aún más el estilo elegido o, por el contrario, crear espacios más eclécticos.

Se pueden mezclar estampados, texturas, colores… Las telas son tan versátiles que pueden aportar gran variedad de estilos y formas. Además, la gran ventaja es que se pueden renovar más fácilmente, con lo que puedes cambiar el look de tu casa con una mínima inversión.

5.- Alfombras

Las alfombras, a pesar de poder incluirlas en el apartado de textiles, merecen una mención aparte. No solo aportan color y textura, sino que, según el tipo de alfombra, podemos conseguir sensaciones diferentes. Pueden aportar calidez, movimiento e incluso ayudarnos a dividir espacios.

6.- Paredes

Desde cuadros grandes o pequeños a tapices o, sencillamente, pintarlas de un color o empapelarlas… Según tu elección lograrás efectos diferentes. Una buena opción es apostar por un tono neutro y un par de acentos de color en forma de cuadros o fotografías.

7.- Iluminación decorativa

Las lámparas deben ir en armonía con todos los elementos de la estancia. Pueden aportar ese toque de originalidad o pueden potenciar los colores o estilos que estemos utilizando. En todo caso, se trata de una elección en la que debe primar la funcionalidad. Dos lámparas de techo sobre una mesa de comedor son, como en esta imagen, una apuesta segura en todos los sentidos.

8.- Plantas y flores

Aunque podrían considerarse meros objetos decorativos, las plantas de interior tienen más funciones que la meramente decorativa. En primer lugar, oxigenan el espacio y aportan sensaciones muy positivas a nuestro estado de ánimo. Sea del estilo que sea, no renuncies a darle a tu interior un toque natural. Una opción muy en boga es colgarlas del techo.

9.- Objetos decorativos

Los objetos decorativos no tendrán una función tan importante como otros elementos de nuestra estancia, pero sí que ayudan a crear rincones especiales donde, haciendo un pequeño ejercicio de estilismo decorativo, podemos darle un toque personal y original a nuestra vivienda. Si tienes recuerdos de viaje, no reduzcas la decoración de tu aparador a un par de imágenes de esas vacaciones en la playa. Busca en tu archivo una foto sugerente y enmárcala. Remata el conjunto con detalles como una pequeña bola del mundo u otros objetos.

10.- Armonía

Finalizamos con el punto más importante de todos y que debemos tener en mente desde el principio. Todos los elementos que conforman un interior deben ir en armonía. Sea cual sea el estilo o sensación que queramos trasmitir en nuestro hogar todo debe tener un sentido. De esta forma, conseguiremos interiores personales y acogedores.

 

Fuente: Idealista.